Las metodologías ágiles se componen por una cantidad de principios, marcos de trabajo, valores y modelos mentales que permiten una solución de problemas mucho más efectiva. El agilismo nace a partir del manifiesto de desarrollo ágil, el cual está conformado por 12 principios que indican las practicas que se deben seguir al momento de desarrollar un programa de software para garantizar su correcto funcionamiento y la satisfacción completa del cliente. A partir de este manifiesto nacen varios modelos o metodologías conocidas como ágiles, algunas aplicadas netamente al desarrollo de software y otras que pueden aplicarse al desarrollo de cualquier tipo de producto.
Encontramos por ejemplo modelos como el Lean, Agile, Scrum, Kanban o XP, los cuales tienen su base en varios de los principios del manifiesto y son en general de los más conocidos en el entorno de desarrollo y empresarial; esta ocasión hablaremos sobre tres de estos modelos, dando a conocer porque estos ayudan a mejorar la productividad y mejorar la calidad tanto en los procesos de desarrollo de software como en la elaboración de otro tipo de productos e incluso en el desempeño diario de actividades dentro de una empresa.
Los modelos sobre los cuales se hablará en este artículo son, como se menciona en el titulo Scrum, Kanban y Lean respectivamente.
Scrum: es un framework que se conforma por diversos roles, eventos y normas que pretenden facilitar la aplicación de los principios ágiles en el entorno de trabajo, así como gestionar el desarrollo y mantenimiento de productos complejos en ambientes igual de complicados. El objetivo de la metodología Scrum es aplicar un conjunto de buenas prácticas de manera regular, que consiga generar equipos de trabajo que ejecuten sus tareas de manera colaborativa, llevando a obtener el mejor resultado en un proyecto. Esto se hace por medio de la división del trabajo en iteraciones, las cuales consisten en detenerse en cierto punto del proyecto, analizarlo y determinar si está yendo por buen camino y en caso de que no sea así corregir errores antes de continuar, esto con el fin de entregar software con menores posibilidades de error o evitar devolverse a etapas muy tempranas del proyecto para corregirlos.
Kanban: la filosofía de esta metodología es la entrega de los proyectos justo a tiempo, esto a través de la gestión visual del proceso en tableros, por medio de los cuales se dirige y gestiona el flujo de trabajo y su avance, en estos también se indican las reglas de trabajo, se reconocen y aprovechan las oportunidades de mejora.
Este modelo fue unos de los pilares del sistema de producción de Toyota, ya que dentro de la gestión del flujo de trabajo se gestiona también que se desarrollen específicamente los productos necesarios en la cantidad de tiempo establecida.
Lean: esta metodología basa su operación en la eliminación de todo aquello que no aporta valor al proyecto o que no lo hará a futuro, para esto se debe tener una capacidad para reaccionar lo antes posible al cambio, así como de evitar la incertidumbre o la toma de decisiones en momentos tardíos. Todo esto como una forma de aportar valor a los clientes; este método además se basa en el trabajo en equipo como una forma de mejorar la eficiencia. Si deseas conocer más sobre esta metodología puedes ingresar a nuestro artículo “Desarrollo de software Lean (LSD) y sus beneficios para las empresas”.
Este tipo de modelos no solo han sido aplicados a los procesos de desarrollo de software, muchas empresas del mundo de la tecnología también los han aplicado para desarrollar algunos de sus modelos de negocio; ya que las metodologías ágiles son aptas para la generación de buenas ideas y el correcto trabajo en equipo, pues son metodologías en las que prima la comunicación e interacción de las personas, para así conocer constantemente el estado de los proyectos y evaluar el cumplimiento de metas y objetivos, logrando obtener proyectos más eficientes, en menor tiempo y con menos errores. En conclusión, las metodologías ágiles gracias a sus principios, mejoran la productividad y eficiencia de los proyectos, no solo en su desarrollo sino también en su funcionamiento.
En Globalbit desarrollamos software a la medida y aplicaciones bajo marcos de trabajo ágiles, para así asegurarle a nuestros clientes sistemas de calidad, productivos y eficientes que podrán aportan gran valor a sus compañías, transformando la forma en que se ejecutan sus procesos y mejorando el ambiente laboral para todos los miembros de estas.
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